A mediados de los 90 y con 15 años descubrí lo que eran los trackers musicales: unos programillas con los que podías hacer música a través del ordenador, más populares en Amiga pero con su tirada también en PC. Gracias a la sección pertinente de la revista PCMania y a que incluían canciones hechas por sus lectores en el CD que acompañaba a la revista, pude hacerme una pequeña biblioteca de instrumentos extraidos de ahí (ojo: no había internet en España todavía, que se dice pronto) y con ello empezar mis andaduras por ese mundillo. Con mi 386 (sí, un puto 386), una tarjeta de sonido clónica de la Soundblaster llamada Audio 16 o algo así y 1 triste y solitario Mega de RAM hice mis primeros experimentos. Afortunadamente un tiempo después migré a un Pentium 133 con ¡16! Megazas de RAM y una Sound Blaster de verdad gracias a los cuales las posibilidades parecían infinitas. Aunque el programa que usaba inicialmente era Scream Tracker, con la llegada de Internet descubrí Impulse Tracker, que venía a ser un clon mejorado del mismo.
En aquella época básicamente hacía 3 cosas con esos programas: mis versiones de canciones existentes, canciones propias con un curioso y particular estilo y canciones para proyectos de videojuegos que - para variar un poco - no llegaron a nada.
Como algunas de ellas no estaban del todo mal y me daba un poco de penilla tenerlas ahí abandonadas en unos viejos y tristes disquetes, he decidido dedicar un pequeño lugar en internet a las mejores. Sí, las que no están aquí son aún peores!
Para los interesados, pues, las tenéis a continuación y en YouTube ;)